Agencia TSS – Hace más de una década que la investigadora Tamara Rubilar se dedica al estudio de los erizos de mar en el Centro para el Estudio de Sistemas Marinos (CESIMAR), en el Centro Nacional Patagónico (CENPAT). Desde hace algunos años, y por iniciativa del Gobierno de la provincia de Chubut, Rubilar está buscando una aplicación comercial para sus investigaciones sobre estos animales marinos también conocidos como equinoideos, especialmente sobre la variante Arbacia dufresnii, autóctona del Mar Argentino. Durante mucho tiempo intentaron su inserción en la cocina gourmet nacional, hasta que descubrieron que no era posible realizar una producción económicamente viable.
Sin embargo, a partir de un trabajo conjunto con la biotecnóloga Sandra Pitta, investigadora del Instituto de Micología y Botánica (INMIBO) de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la Universidad de Buenos Aires (UBA), encontraron un potencial en la extracción de metabolitos secundarios de los erizos estudiados. Estos compuestos orgánicos que son sintetizados por los organismos vivos son muy cotizados en industrias como la farmacéutica, la cosmética y la de alimentos balanceados de alta calidad. En el primero de los casos, los metabolitos secundarios pueden servir para evitar los efectos secundarios no deseados de medicamentos, entre otras aplicaciones.
Seguir leyendo...